FALLEN LEAVES: SINGULARIDAD

El escritor y director finlandés Aki Kaurismaki ("Un hombre sin pasado"). Ansa (Alma Poysti) trabaja en un supermercado, por culpa de un guardia de seguridad con malas intenciones es despedida de su trabajo. Un día sale con una amiga a un karaoke y conoce a Holappa (Jussi Vatanen), un hombre que tiene problemas con la bebida.
Kaurismaki tiene una personalidad propia a la hora de contar las historias, definir los personajes, y dirigir a los actores. Su estilo no es para todos, su rareza a la hora de que los actores sean poco expresivos y la reducción de los diálogos al mínimo minimorum, hace que para algunos sean películas que no les lleguen. Hay que encontrarle el punto a sus forma de hacer. Suele elegir personajes solitarios, que no llevan vidas fáciles, pero a la vez no dramatiza sobre ello, incluso muchas de las situaciones tiene un punto de humor muy característico suyo. Una vez que entras en su universo, es fácil encariñarse con los protagonistas y deleitarse con su dirección de arte, el tipo de localización y decorados minimalistas con sorprendentes y bonitas combinaciones de colores. 

En este caso se trata de una historia de amor entre dos almas solitarias deseosas de encontrar a una buena persona con la que compartir cosas y que haga que la vida sea un poco especial. La historia de amor es el núcleo del film, pero el director incluye la actualidad, en concreto, la guerra de Ucrania en los boletines de radio que escuchan los protagonistas. También hace una dura crítica sostenida a las condiciones de trabajo en su país. Un film que hay que ver sabiendo que se trata de un estilo narrativo y un tempo muy singulares. (Valoración: 6 sobre 10).