"UNA CITA PARA EL VERANO"
"Una cita para el verano" es la primera y
única película que dirigió Philip Seymour Hoffman y que pese a ser de 2010, en España se ha
estrenado este verano. Si no fuera por la desaparición de Hoffman
seria una película con poca repercusión, un drama de costumbres con algunas puntas pero en global de relativo interés. Basada en la obra de teatro de Bob Glaudini, (guionista del film), fue representada por Hoffman desde la compañía LAByrinth, compañía en la que él tenía una participación activa y continuada en el tiempo.
El protagonista es Jack (Seymour Hoffman), un chófer de limusina con escasos recursos emocionales para relacionarse, especialmente con mujeres, y amigo de un matrimonio en crisis (John Ortiz y Daphne Rubin-Vega) que le presenta a una amiga de ella (Amy Ryan) para ver si se gustan. Y así sucede. La película nos va contando por una parte la evolución negativa del matrimonio y por otra los esfuerzos del personaje de Seymor Hoffman por agradar a la mujer llegando a aprender a cocinar o nadar sólo para conquistarla.
Lo peor resuelto de la película es su ritmo ligeramente lento, y sobre todo el diseñar unos personajes muy neuróticos de reacciones excesivamente exageradas, quizás fruto de la procedencia teatral de la obra. Los personajes hacen aflorar sus sentimientos de forma excesiva, algo adecuado si se tratara de una comedia que busca la caricatura, pero menos acertado en un drama que pretende
reflejar la soledad del ser humano y la dificultad de encontrar pareja, sobre
todo a cierta edad, en un marco de gente "corriente" de estrato proletario.El protagonista es Jack (Seymour Hoffman), un chófer de limusina con escasos recursos emocionales para relacionarse, especialmente con mujeres, y amigo de un matrimonio en crisis (John Ortiz y Daphne Rubin-Vega) que le presenta a una amiga de ella (Amy Ryan) para ver si se gustan. Y así sucede. La película nos va contando por una parte la evolución negativa del matrimonio y por otra los esfuerzos del personaje de Seymor Hoffman por agradar a la mujer llegando a aprender a cocinar o nadar sólo para conquistarla.
Lo mejor, los actores y sus interpretaciones, destacando por supuesto el propio Hoffman, como siempre excelente, humanizando y dotando de verdad al personaje, nunca siendo él mismo, y también John Ortiz, su amigo incondicional, actor que también hacia con él la obra en teatro. Estupendas las escenas de las clases de natación de Hoffman y su amigo que le enseña, donde el personaje se familiariza con el agua, un medio inicialmente hostil y utilizado como analogía de otro que tampoco le resulta fácil, el amoroso. Definitivamente la determinación del personaje de Hoffman por hacer todo lo que sea necesario para conseguir su objetivo es un rasgo que hace que el espectador pese a lo peculiar que es el personaje empatice con él.
En este caso, aunque "Una cita para el verano" sea un 6, hay que verla, por verle a él, y porque a él le hubiera gustado. (Valoración: 6 sobre 10)
A mi me gusto... me parecieron buenas las escenas de ejerciciosde visualizacion en la piscina y en la cocina...
ResponderEliminarMe gusto la forma en que se aborda como se construye una relacion y sedestruye otra.
Para mi sobra el uso de la cancion cuando Amy Ryan, amiga de la protagonista se encierra en el baño, el recurso me parecio bueno con hacer salir de la desesperacion a Hoffman, pero un poco absurdo y que quitar valor a la protagonista la segunda vez.
Gracias Mila¡ .Tienes razon en que es muy interesante como una relacion va hacia la ilyusion y se construye y la otra va en sentido inverso. Y si, la escena del encierro en el baño y la reaccion de los demas personajes resulta un poco ridicula. Gracias por escribir¡¡
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