UN LUGAR TRANQUILO: TERROR BIEN HECHO

El actor y director John Krasinski ("Los Hollar", "The office") se estrena en el género de terror con acierto. El matrimonio de Evelyn (Emily Blunt) y Lee (John Krasinski) y sus tres hijos, una de ellos sorda, parecen ser los únicos supervivientes en un mundo donde los ruidos aceleran la agresividad de unos monstruos. En esa situación límite la pareja está obsesionada por proteger a los tres niños.

La historia tiene como base la originalidad de ligar la supervivencia de los protagonistas a practicar una vida en silencio, algo que en sí mismo genera un ambiente de suspense, de nerviosismo y de incomodidad que trabajan a favor de obra. Técnicamente este mundo de silencio está muy bien resuelto alternándose el silencio total, punto de vista de la hija sorda, con el mundo obligadamente silencioso del resto de miembros.
El guión es hábil planteando la combinación de situaciones de peligro frente a los monstruos con momentos de tranquilidad donde vemos la “nueva normalidad” de la familia. Aunque le 80% de la película construye sobre el miedo y las situaciones dramáticas, el guión y las actuaciones hacen que estén muy bien trabadas las relaciones entre los personajes. Momentos de juegos, de hacer las tareas del hogar, de intimidad entre personajes, de los padres enseñando a los niños: la cotidianidad adaptada a no hacer ruido. Todos los actores grandes y pequeños trabajan muy bien, aunque destaca especialmente Emily Blunt ("La pesca del salmón en Yemen", "Sicario") una estupenda actriz, siempre muy natural que se gana el afecto de la audiencia y que junto al resto de personajes hace que suframos con ellos y por ellos.
Una historia que utiliza los típicos resortes de las películas de género con mucha eficacia. La forma de resolver los peligros en los que se ven envueltos los miembros de la familia hace que la película sea extremadamente resultona y los sustos funcionen a la perfección. A destacar el papel que en todo eso juega la banda de sonido. (Valoración: 6 sobre 10).