BORDER: ALMA BLANCA

Ali Abassi iraní establecido en Suecia dirige esta peculiar película con guión de él mismo basado en un relato corto de John Ajvide Lindqvist, escritor de "Déjame entrar" la historia de vampiros que dió lugar a la maravillosa película del mismo nombre.

Tina (Eva Melander) es una mujer de aspecto grotesco con una extraordinaria capacidad para percibir emociones y sensaciones en los demás a través de su olfato. Un día se encuentra con Vore (Eero Milonoff) un hombre de aspecto similar al suyo.
Nos encontramos ante un guión muy original y un tratamiento y forma de contar cruda y frontal que puede no gustar a todos. Se podría considerar como una especie de oscura fábula que nunca deriva hacia lugares comunes. No solo nos habla de lo que podríamos esperar de ese argumento: lo que marca ser distinto y tener un físico desagradable, la dificultad de esas personas para relacionarse, para encontrar pareja. Va mucho más allá porque la historia da muchos vuelcos de forma que hasta el final no se comprenderá todo lo que el film quiere contar. 

El centro de todo es el personaje de Tina, precioso, con un recorrido vital muy intenso desde el momento en que conoce a otro ser como ella. Parecidos físicamente, con el mismo don para detectar cosas no perceptibles por los demás, pero muy diferentes en su propósito vital y su forma de conducirse. Tina descubre cosas de gran trascendencia sobre ella misma, cosas que la afectarán profundamente. Una historia que se enmarca en el cine fantástico pero donde lo más importante tiene que ver con la ética, con la manera de enfocar el pasado, de entender de donde vienes y la forma que que filtras esa información y la devuelves hacia fuera. La actuación de Eva Melander es muy sólida siendo de gran dificultad, aborda momentos muy dramáticos y es capaz de transmitir sensibilidad, vulnerabilidad desde un aspecto físico duro y desagradable. Además del reto de tener que conducirse a veces con una gestualidad semi- animal. Hay que destacar el soberbio trabajo de maquillaje por el que Ludstrom y Goldammer  están nominados al Oscar en esa categoría.

Un film ganador de varios premios (Seminchi, Cannes Mejor película en Un Certain Regard),  sorprendente pero también desconcertante. Su oscuridad y lo sórdido que puede resultar no la hacen fácil. (Valoración: 7 sobre 10).