EN LA PLAYA DE CHESIL: MUCHO DRAMA
Dominic Cooke director de teatro que se lanzó al mundo audiovisual con la serie "The hollow crown" , dirige esta película basada en una novela de Ian McEwan con guión del propio McEwan. Inglaterra años 60, Edward (Billy Howley) y Florence (Saoirse Ronan) son una pareja de enamorados muy joven y poco experimentada que decide casarse al poco de conocerse. Nada más producirse la boda comienza el conflicto.
El drama se condensa en las horas posteriores a la boda, en el inicio de su luna de miel, horas que serán decisivas. La estructura narrativa da protagonismo absoluto a la situación de la pareja en el hotel en la playa. Conversaciones y acción sobre las que gira la película, que se interrumpe con numerosos flashbacks a partir de los cuales conocemos la historia de la pareja. Cómo se conocieron, sus aspiraciones profesionales, cómo son sus familias, su pertenencia a diferentes clases sociales... Después de cada flashback se vuelve una y otra vez al hotel, diseccionando cada acercamiento y alejamiento de la pareja, utilizando planos cortos de detalle (de las manos, gestos de los dos actores) y trabajando el drama de forma muy teatral, algo que resulta un tanto excesivo.
Los dos actores hacen una buena interpretación y conectan como pareja. Saoirse ("Brooklyn", "Lady Bird") solvente como siempre y Howley menos conocido pero también transmite. Está sobre todo muy acertado en las escenas que se desarrollan en su casa familiar sobre todo las que comparte con Anne Marie Duff como su madre, un personaje muy bonito y muy bien interpretado.
Los dos personajes y sus historias familiares son atractivas, especialmente la familia del chico. Lo menos afortunado es el tono dramático en exceso, un poco desfasado de las escenas en el hotel de la playa y una escena en la parte final que utiliza un recurso narrativo muy manido y donde un monumental fallo de caracterización impide conseguir la emoción buscada. Sin embargo, es muy buen final el último plano en esa playa en forma de lengua donde se resume visualmente lo que ha sucedido a la pareja. (Valoración: 6 sobre 10).
El drama se condensa en las horas posteriores a la boda, en el inicio de su luna de miel, horas que serán decisivas. La estructura narrativa da protagonismo absoluto a la situación de la pareja en el hotel en la playa. Conversaciones y acción sobre las que gira la película, que se interrumpe con numerosos flashbacks a partir de los cuales conocemos la historia de la pareja. Cómo se conocieron, sus aspiraciones profesionales, cómo son sus familias, su pertenencia a diferentes clases sociales... Después de cada flashback se vuelve una y otra vez al hotel, diseccionando cada acercamiento y alejamiento de la pareja, utilizando planos cortos de detalle (de las manos, gestos de los dos actores) y trabajando el drama de forma muy teatral, algo que resulta un tanto excesivo.
Los dos actores hacen una buena interpretación y conectan como pareja. Saoirse ("Brooklyn", "Lady Bird") solvente como siempre y Howley menos conocido pero también transmite. Está sobre todo muy acertado en las escenas que se desarrollan en su casa familiar sobre todo las que comparte con Anne Marie Duff como su madre, un personaje muy bonito y muy bien interpretado.
Los dos personajes y sus historias familiares son atractivas, especialmente la familia del chico. Lo menos afortunado es el tono dramático en exceso, un poco desfasado de las escenas en el hotel de la playa y una escena en la parte final que utiliza un recurso narrativo muy manido y donde un monumental fallo de caracterización impide conseguir la emoción buscada. Sin embargo, es muy buen final el último plano en esa playa en forma de lengua donde se resume visualmente lo que ha sucedido a la pareja. (Valoración: 6 sobre 10).
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