REHENES: EMOCIONAL DRAMA POLITICO


El director Rezo Gigineishvili firma esta película basada en una historia real ocurrida en la Unión Soviética en 1983. Siete jóvenes de la clase intelectual de Georgia, deciden huir del país secuestrando un avión. El secuestro resulta fallido.
Estamos ante una excelente película en la que se reconstruyen los sucesos previos y posteriores al secuestro del avión. El guión y la forma de contar la historia son sólidos aunque quizás la parte inicial de la prepación del secuestro se puede hacer larga, con un ritmo lento y escasos diálogos (hay más información en los silencios que en las conversaciones) existe el riesgo de que el espectador no llegue a entrar lo suficiente en la historia. Entre los 7 jóvenes, destaca una pareja a punto de casarse: Mika (Irakli Kvirikadze) y Anna (Tinatin Dalakishvili), de hecho se decide que el secuestro suceda al dia siguente de la boda. Al director georgiano lo que de verdad le interesa es penetrar en la situación emocional de los personajes, especialmente de la pareja, que pasa por toda una gama de estados emocionales: euforia, excitación, pero también dudas, intranquilidad... Este estado anímico cambiante les acompaña hasta el momento clave y se refleja muy bien en las interpretaciones.
El director y tambien guionista elige muy bien ciertos momentos para expresar las ideas que quiere recalcar.  La película abre con una escena muy significativa que plasma de forma sencilla la abrumadora falta de libertad del país, el grupo de amigos se está bañando en la playa disfrutando de un momento placentero cuando unos soldados les obligan a salir del agua por ser más de las 23.00h de la noche. La actitud de Mika se cuenta especialmente bien, es de quien tenemos más información (le vemos en relación con más personajes: amigos, padres, su novia), un personaje con un punto idealista, soñador que se enfrenta de forma ingenua al secuestro, cree que no será cruento, que será fácil, y está poco o nada preparado para lo que sucederá. Genial la forma en que baila en su boda, con una energía desbocada que los asistentes achacan a que se acaba de casar, pero que nosotros sabemos es una mezcla de histeria y adrelina canalizada en forma de baile. La novia, es el personaje más pasivo que se deja arrastrar por los demás, en el secuestro una espectadora que observa aterrada lo que sucedede, el drama, la tristeza, el desconsuelo se ven en su rostro.
La parte del secuestro está muy bien rodada, de forma muy realista, recuerda a "United 93"(Paul Greengrass). Recoge bien las situaciones límite que se viven en el avión, escenas dantescas cuando todo se complica y cómo los jóvenes van tomando decisiones desesperadas, actuando desde el precipicio.
Una historia llena de mensajes y con mucha carga emocional donde entendemos el sufrimiento y malestar de los chicos y el impacto en su entorno donde también se indaga en la influencia que los padres sin querer han tenido en la decisión de los chicos. El director es como un médico que nos informa minuto a minuto sobre la temperatura del enfermo, nos da el pulso del estado de los personajes. (Valoración: 8 sobre 10).




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