UN AMIGO EXTRAORDINARIO: BUENOS SENTIMIENTOS
La actriz, escritora y directora Marielle Heller ("Podrás perdonarme algún día?"), dirige esta película inspirada en el artículo de Tom Junod "Can you say... hero?" publicado en 1998 por la revista Esquire sobre Fred Rogers, un famoso presentador americano de TV. Lloyd Vogel (Matthew Rhys) es un periodista, que por problemas personales se ha convertido en una persona escéptica y negativa. Trabaja en una revista y le encargan hacer un artículo sobre Fred Rogers (Tom Hanks), presentador de un programa infantil de TV con mucha audiencia, una persona que parece ser justo lo opuesto a él mismo.
A juzgar por las dos películas que ha dirigido, parece que a Marielle Heller le interesan historias donde los personajes están emocionalmente tocados, arrastrando traumas que les hacen enfrentarse a la vida de una forma que les hace infelices. La historia se enfoca en la evolución emocional del periodista a partir de las escasas pero efectivas interacciones entre entrevistador y entrevistado. El guión tenía el reto de hacer creíble ese impacto aún cuando solo se ven en dos o tres ocasiones. Pequeños comentarios y algunas preguntas que incomodan al periodista, son suficientes para que este cambie su perspectiva de la vida. Una historia se sentimientos, sutil, donde ha debido ser complejo para Hanks asumir un personaje real archiconocido (siempre más desafiantes ) que puede parecer cursi y bobalicón, o resultar impostado, que es el prejuicio del periodista. Tom Hanks nunca falla, y esta vez tampoco, lo aborda muy bien, con gran parecido al presentador, es vital ver la película en versión original para apreciar su actuación ya que la forma de hablar es un aspecto clave del personaje y el doblaje modifica mucho la actuación de Hanks. Matthew Rhys está bien encajado en su papel de persona herida. Además se puede disfrutar de Chris Cooper como padre del periodista en un personaje muy a su medida.
A juzgar por las dos películas que ha dirigido, parece que a Marielle Heller le interesan historias donde los personajes están emocionalmente tocados, arrastrando traumas que les hacen enfrentarse a la vida de una forma que les hace infelices. La historia se enfoca en la evolución emocional del periodista a partir de las escasas pero efectivas interacciones entre entrevistador y entrevistado. El guión tenía el reto de hacer creíble ese impacto aún cuando solo se ven en dos o tres ocasiones. Pequeños comentarios y algunas preguntas que incomodan al periodista, son suficientes para que este cambie su perspectiva de la vida. Una historia se sentimientos, sutil, donde ha debido ser complejo para Hanks asumir un personaje real archiconocido (siempre más desafiantes ) que puede parecer cursi y bobalicón, o resultar impostado, que es el prejuicio del periodista. Tom Hanks nunca falla, y esta vez tampoco, lo aborda muy bien, con gran parecido al presentador, es vital ver la película en versión original para apreciar su actuación ya que la forma de hablar es un aspecto clave del personaje y el doblaje modifica mucho la actuación de Hanks. Matthew Rhys está bien encajado en su papel de persona herida. Además se puede disfrutar de Chris Cooper como padre del periodista en un personaje muy a su medida.
Una historia bonita que hace recuperar un poco la fe en el ser humano, sobre la capacidad de las personas de influir en otras positivamente. Especialmente atractiva para personas interesadas en el desarrollo personal. (Valoración: 7 sobre 10).
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