MR WAIN: EXCELENTE CUMBERBATCH
El actor, guionista y director William Sharpe ("Flowers"), dirige este film sobre el pintor británico de finales del siglo XIX, Louis Wain, célebre por sus cuadros donde los gatos eran protagonistas. Louis (Benedict Cumberbatch), es un joven un tanto excéntrico, de carácter peculiar, con muchísimo talento para el dibujo. Louis intenta sacar adelante a sus hermanas una vez su padre ha fallecido. Conoce a Emlily (Claire Foy), y se enamora de ella de inmediato. También será importante para él encontrar a un gatito callejero.
El trabajo actoral de Cumberbatch es maravilloso. Se enfrenta al personaje de un pintor que se hizo famoso por retratar gatos en todo tipo de actitudes, estilos... siendo el primer artista que daba a los gatos un status de mascota que hasta ese momento solo ocupaban los perros. El personaje sufre algún tipo de enfermedad mental que en su juventud podría considerarse manejable y darle simplemente un punto extravagante que tantas veces se liga a la personalidad de los artistas. Sin embargo, con el paso del tiempo y las cosas que le ocurren en la vida, el dibujante se desestabiliza. La interpretación de Benedict es excelente, así como el trabajo de caracterización del personaje que comienza siendo mucho más joven que el actor en la actualidad, y acaba siendo mucho mayor y con un deterioro físico acusado. Un personaje tierno, sensible que hace una pareja adorable con Claire Foy. También es también destacable el personaje de su hermana mayor, una persona que ejerce una presión constante sobre él que no maneja bien. La enfermedad mental, muchas veces vinculada a personas con un extraordinario talento, suscita una profunda tristeza por la incomprensión que generan estas dolencias y la angustia de quien la sufre. Solo grandes actores pueden conjugar satisfactoriamente ráfagas de lucidez y normalidad con momentos de locura, como pasaba con Sean Penn en "Entre la razón y la locura", o Willem Dafoe en "Van Gogh a las puertas de la eternidad", Una historia sobre un personaje desagraciado y entrañable. (Valoración: 6.5 sobre 10).
El trabajo actoral de Cumberbatch es maravilloso. Se enfrenta al personaje de un pintor que se hizo famoso por retratar gatos en todo tipo de actitudes, estilos... siendo el primer artista que daba a los gatos un status de mascota que hasta ese momento solo ocupaban los perros. El personaje sufre algún tipo de enfermedad mental que en su juventud podría considerarse manejable y darle simplemente un punto extravagante que tantas veces se liga a la personalidad de los artistas. Sin embargo, con el paso del tiempo y las cosas que le ocurren en la vida, el dibujante se desestabiliza. La interpretación de Benedict es excelente, así como el trabajo de caracterización del personaje que comienza siendo mucho más joven que el actor en la actualidad, y acaba siendo mucho mayor y con un deterioro físico acusado. Un personaje tierno, sensible que hace una pareja adorable con Claire Foy. También es también destacable el personaje de su hermana mayor, una persona que ejerce una presión constante sobre él que no maneja bien. La enfermedad mental, muchas veces vinculada a personas con un extraordinario talento, suscita una profunda tristeza por la incomprensión que generan estas dolencias y la angustia de quien la sufre. Solo grandes actores pueden conjugar satisfactoriamente ráfagas de lucidez y normalidad con momentos de locura, como pasaba con Sean Penn en "Entre la razón y la locura", o Willem Dafoe en "Van Gogh a las puertas de la eternidad", Una historia sobre un personaje desagraciado y entrañable. (Valoración: 6.5 sobre 10).
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